El pasado viernes 15 de Julio durante un operativo de la Marina y la Fiscalía General de la República, en el municipio de San Simón, Sinaloa fue aprehendido Rafael Caro Quintero tras haber estado prófugo 9 años.
Con una recompensa de 20 millones de dólares y en la lista de los 10 más buscados por el FBI, Caro Quintero se encontraba escondido en los matorrales. Max, un sabueso de búsqueda delataría su posición e iniciaría el proceso de arresto y extradición de uno de los mayores narcotraficantes en la historia de México.
Rafael Caro Quintero fue una de las cabezas del ahora ya extinto Cartel de Guadalajara, junto con Ernesto Fonseca Carrillo “Don Neto” y Miguel Angel Felix Gallardo “El Jefe de Jefes”.
El Búfalo, una pista que la DEA llevaba ya siguiendo de largo rato se volvería en el mayor incauto de marihuana en la historia a la época. La finca era el centro de operaciones de Caro Quintero, cerca de mil hectáreas de cultivos y una producción anual de 8 mil millones de dólares.
Las autoridades alegaron la destrucción de más de 10,000 toneladas de marihuana. Un gran golpe al cartel que claramente no pasaría desapercibido. El 7 de febrero de 1985, el agente especial de la DEA Enrique “Kiki” Camarena saldría de su oficina para encontrarse con su esposa para la hora de la comida esto no llegaría a pasar ya que 4 hombres lo estaban esperando, lo meterían al auto y darían fuga.
Horas después, Alfredo Zavala Avelar, piloto del departamento de agricultura e infórmate de la DEA desaparecería también. Su esposa notificaría a la DEA de su desaparición y empezaría la exhaustiva búsqueda del agente.
Pocos frutos daría la búsqueda ya que un mes después, los cuerpos del agente Camarena y el piloto Zavala serian encontrados la mañana 7 de marzo en un operativo a una hacienda cerca de la ciudad de Zamora, Michoacán. Hacienda propiedad de Caro Quintero. Los cuerpos presentaban señales de “violencia física, pero no heridas de bala”, en palabras de Jack Lawn, administrador de la DEA.
El secuestro, tortura y ejecución del agente Camarena sería el evento clave para la caída de Rafael Caro Quintero, Miguel Ángel Félix Gallardo y Ernesto Fonseca y junto con ellos, la posterior separación del cartel de Guadalajara.
El cuatro de abril del mismo año, en una mansión en Alajuela Costa Rica, seria arrestado y extraditado a México Caro Quintero. Fue sentenciado a 40 años de cárcel por el asesinato del agente Camarena, junto con otros cargos. 28 años pisaría prisión Caro Quintero, saldría libre doce años antes debido a un error en el debido proceso.
Nueve años después, el narcotraficante se vería en camino a estar tras las rejas una vez más, solamente que esta vez puede que no sea sobre suelo mexicano.
El lento proceso del debido proceso
El fiscal general de los Estados Unidos, Merrick Garland dio un comunicado tras el arresto del narcotraficante el pasado viernes. El gobierno estadounidense buscará su inmediata extradición a suelo americano, pero este tipo de procesos llevan su tiempo.
Tomemos por ejemplo el caso de Joaquín Guzmán “El Chapo”, quien actualmente cumple condena en una prisión de máxima seguridad en los Estados Unidos, pero para que eso sucediera tomó 1 año llevar a cabo todo el proceso.
También tenemos que tomar en cuenta las declaraciones del presidente López Obrador, durante la conferencia mañanera del pasado lunes 18 de Julio, el presidente comento acerca de la aprehensión del narcotraficante y descartó que la DEA haya participado en la captura de Caro Quintero. También rechazo que dicha captura haya sido un trato del reciente encuentro con el jefe de estado norteamericano Joe Biden.
“Son acuerdos que tienen que ver con intereses generales nacionales, Un presidente de México no puede ir a tratar con un presidente de otro país el asunto de un presunto delincuente".
El mismo día, el juez séptimo de distrito de amparo en materia penal de Jalisco, Francisco Reséndiz Neri, otorgaría una suspensión al proceso de extradición en favor del narcotraficante. Posteriormente el juez se declararía incompetente en orden de seguir el juicio, argumentó que un juez del Estado de México debería ser el encargado de llevar a cabo el proceso debido a que actualmente reside en CEFERESO (Centro Federal de Readaptación Social) numero 1, Altiplano.
En contraste, podemos recordar lo acontecido en Culiacán, Sinaloa el pasado 17 de Octubre de 2019. El fallido operativo donde se llevó a cabo el arresto y horas después liberación de Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín Guzmán Loera. Uno de los primeros eventos más importantes en el recién iniciado sexenio del presidente López Obrador.
Hasta ahora la violencia parece que no tiene fin. El problema del narcotráfico es demasiado complejo y parece no tener solución a la vista.
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