A veces se piensa que el verdadero problema de México es el clasismo, pero en ese discurso suele pasarse de largo el racismo sistemático que también se vive en el país. La discusión sobre la discriminación por el color de piel se reabrió luego de que usuarios en las redes sociales denunciaran que en el Sonora Grill Prime en Polanco, utilizaban “códigos” para sentar a los comensales en diferentes zonas dependiendo de su color de piel.
La denuncia indica que se daba preferencia a las personas de “tez blanca” para sentarlas en la terraza, ya que son los lugares que se ven desde la calle. Y las personas que “no cumplían los estándares”, es decir, las personas “morenas”, se les sentaba donde no fueran tan visibles desde fuera.
La indignación de la gente en redes sociales no tardó en llegar, volviéndolo un caso mediático. Se han sumado denuncias sobre casos de discriminación en este establecimiento y en otros, volviendo a poner sobre la mesa las maneras en que se hace visible el racismo en el país, que aún son muchas. Lamentablemente, estos casos no son sorpresivos. Creo que hay actos de racismo tan comunes y sutiles que ya no los notamos.
En un país con una mayoría de personas de tez morena, la publicidad muestra principalmente a personas blancas. Ya sean anuncios de comida, de servicios, de escuelas o de casi cualquier producto. También vemos este mismo problema en los contenidos mediáticos como películas, series o telenovelas. Desde los medios se nos da el mensaje de que las personas morenas no deben ser vistas. Nos muestran la blanquitud como una característica aspiracional y equivalente a éxito y felicidad.
Pero desafortunadamente, en nuestro país el color de tu piel sí influye en las oportunidades laborales y de educación. Un estudio del 2017 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) demostró que las personas blancas en cargos directivos y profesionales son el doble que los de tez morena, y lo inverso sucede en cargos de servicios o artesanales. También se pueden observar las diferencias de escolaridad relacionadas con el color de piel.
Entonces, el que haya una segregación en un restaurante no es un caso aislado, sino resultado de un racismo sistémico y muchas veces ignorado. Sobre este caso en específico del Sonora Grill, el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación en la Ciudad de México (COPRED) declaró que están haciendo una investigación exhaustiva para determinar si hubo discriminación y tomar las medidas pertinentes.
Ojalá este caso no se olvide pronto y que las autoridades, junto con la población, atiendan estos casos que son evidentes en diferentes establecimientos; ya sea por color de piel, orientación sexual, género, etc. Debemos dejar de normalizar el racismo y clasismo que se viven diariamente en México y tomar acciones para erradicarlo.
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